El actual presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, confirmó la noticia con profundo pesar:
"Con profundo dolor comunicamos que falleció nuestro compañero Pepe Mujica. Presidente, militante, referente y conductor. Te vamos a extrañar mucho Viejo querido. Gracias por todo lo que nos diste y por tu profundo amor por tu pueblo."
Nacido el 20 de mayo de 1935 en Montevideo, Mujica fue una figura emblemática que vivió múltiples vidas: guerrillero tupamaro, prisionero político, legislador, ministro y presidente. Su vida estuvo marcada por la lucha por la justicia social, la coherencia ética y un compromiso inquebrantable con el pueblo uruguayo.
Durante su presidencia (2010–2015), Mujica impulsó reformas históricas como la legalización del matrimonio igualitario, el aborto y la marihuana, posicionando a Uruguay como un referente en derechos humanos y políticas progresistas en América Latina.
Su estilo de vida austero, viviendo en una chacra en las afueras de Montevideo y donando alrededor del 90% de su salario presidencial a organizaciones benéficas, le valió el reconocimiento internacional como “el presidente más pobre del mundo”.
Un legado que trasciende fronteras
Más allá de su labor política, Mujica se convirtió en un referente ético y filosófico, abogando por una vida sencilla y la importancia de los valores humanos sobre el consumismo. Su legado perdura en las ideas que sembró y en la inspiración que brindó a millones de personas en todo el mundo.
En sus propias palabras, Mujica expresó:
“El odio es fuego como el amor, pero el amor es creador y el odio nos destruye. Mi ciclo terminó. Estoy agradecido. Agradecido porque he vivido intensamente, con errores, con fracasos, pero el regalo más grande de la vida es la vida misma.”
Su partida deja un vacío en la política y en el corazón de muchos, pero su ejemplo de vida continúa siendo una fuente de inspiración para las futuras generaciones.
