La crisis de seguridad en Washington D.C. ha llegado a un punto crítico. Este lunes, el presidente Donald Trump anunció la invocación de la sección 740 de la Ley de Autonomía del Distrito de Columbia, medida que le permite asumir control federal directo de la Policía Metropolitana.
La decisión llega tras conocerse que la tasa de homicidios en la capital estadounidense es actualmente más alta que la de Bogotá o Ciudad de México, una estadística que ha encendido alarmas en todos los niveles de gobierno.
“La semana pasada desplegamos 500 agentes federales de distintas agencias, desde el FBI, ATF y DEA hasta la Policía de Parques, los U.S. Marshals, el Secret Service y el Departamento de Seguridad Nacional. Hicieron decenas de arrestos”, afirmó Trump en un mensaje oficial.
La orden incluye la activación inmediata de la Guardia Nacional, que apoyará las labores de patrullaje y control de zonas de alta incidencia criminal. El plan, según la Casa Blanca, tiene como objetivo restablecer la seguridad y reducir la violencia armada.
Este despliegue federal marca un momento decisivo para la seguridad en Washington D.C., donde la presión social y política exige resultados rápidos frente a una violencia que no cede.















