El primer actor Germán Robles es uno de los nombres que están asociados a la historia de esta obra de terror
Cuando el director y actor Rafael Perrín vio La Dama de Negro en Londres, nunca imaginó que su aventura de traerla a los escenarios mexicanos se convertiría en la más longeva del teatro de terror.
El 18 de enero de 2024, cuando la obra regrese al Teatro Principal de Puebla, estará a un mes de cumplir tres décadas en cartelera.
Solamente en 2009 por la pandemia de la influenza AH1N1, y en 2020 y 2021 por el Covid-19, La Dama de Negro dejó de pisar los escenarios.
“Yo creo que la mancuerna La Dama de Negro y Teatro Principal, ha sido una relación de amor desde hace muchos años”.
“La primera gira que hicimos fue aquí, a Puebla, y eso nos llena de emoción porque estaremos a un mes exacto, el 17 de febrero cumpliremos los 30 años de La Dama de Negro, así que vendremos a festejar 29 años 11 meses y un día de La Dama de Negro, y eso nos llena de emoción”, dice Rafael Perrín.
El inicio
El primer actor Germán Robles (QEPD), es uno de los nombres que están asociados a la historia de La Dama de Negro en México, no solamente por los años que interpretó a Arthur Kipps, también porque fue el primero en creer en la obra.
“Don Germán fue la primera figura que confió en nosotros. Ofrecimos la obra a muchos actores, pero no para el papel de Arthur Kipps, porque siempre pensamos que sería para Germán. Cuando se lo ofrecimos a Germán, lo aceptó inmediatamente que lo leyó”.
“En septiembre-agosto del 93 le entregamos el libreto, él vivía en el centro de la Ciudad de México. Yo vivía en el norte de la ciudad y me acuerdo que no tenía coche, nos movíamos en transporte público. Le dejamos el libreto en su casa y me dijo: ‘lo voy a leer, y en unas dos semanas, yo le resuelvo’. Entonces me fui a mi casa y cuando llego, suena el teléfono de la casa y era el maestro Robles, que me dice, ‘¿dónde firmo?’”, recuerda el director.
Sin embargo, no hubo la misma suerte para encontrar a un actor joven. Simple y sencillamente nadie creía en el proyecto, así que fue el mismo Rafael Perrín quien tuvo que subir al escenario.
“Se lo ofrecimos a todos los actores de esa época, todos nos dijeron que no. Nos dijeron que la obra no iba a funcionar, que el terror en México no iba a funcionar”.
“Yo me acuerdo que después de buscar mucho, le dije a don Germán: ‘pues le tengo una buena y una mala. La buena es que ya tenemos al actor, y la mala es que soy yo’”.
No solamente los actores tenían poca fe en la puesta en escena, también los productores teatrales de la capital del país.
“Antes existía una cosa que se llamaba Protea, los productores de teatro crearon un sindicato, que eran los que sacaban en el periódico de Ciudad de México, todas las obras”.
“Fuimos el señor Antonio Calvo y yo a sentarnos en ese escritorio con el productor general de ahí, y le dijimos que íbamos a hacer una obra de terror, entonces llama a todos, “vengan, vengan”, y dice, ‘miren a este par, que van a hacer dizque terror en México’, y todos muertos de risa burlándose de nosotros. Pues ya todos esos productores se murieron y la obra sigue”.
El 17 de febrero de 1994, La Dama de Negro se apareció por primera vez en el Teatro Arlequín de la Ciudad de México, con las actuaciones de Germán Robles y Rafael Perrín, y con la producción de Antonio Calvo.
Nuevos tiempos
Aunque conserva la historia original, La Dama de Negro también ha tenido que modernizarse para captar al público joven, el que está acostumbrado al entretenimiento en la pantalla y al contenido “en demanda”.
“Cuando estuvimos en Toluca, llegaron dos jóvenes como de 18 y 14 años, quedaron fascinados, dijeron: ‘qué cosa más maravillosa’. Dije, bueno, si a los jóvenes les sigue gustando, estamos asegurando una década más”, dice Rafael Perrín.
Entre los cambios que han realizado se encuentran la desaparición del intermedio para hacer la obra más ágil, y el uso de tecnología en iluminación y audio.
“Cada vez buscamos que los jóvenes se sorprendan y que la obra no se sienta viejita, aunque sigue siendo el texto original de hace 30 años. Eso es lo que es una maravilla”.
Además, el director se ha permitido algunas libertades, como cambiar la mención del actor Laurence Olivier, que viene en el libreto original, por la de Matthew Perry, la estrella de la serie Friends, que falleció en octubre de 2023.
Sin competencia
En 2012, Hammer Film Productions estrenó La Dama de Negro, película protagonizada por Daniel Radcliffe, la estrella de Harry Potter.
La campaña publicitaria que le precedió fue bien aprovechada por los productores de la obra de teatro, que ya tenían una amplia tradición en la cartelera mexicana.
“A la película le iban a poner La mujer de negro, y entonces hablamos con la distribuidora de la película y les dijimos que llevamos 20 años anunciando La Dama de Negro, les dijimos: ‘pónganle La Dama de Negro’”.
“Ellos ponen La Dama de Negro y nos sentimos muy beneficiados, porque cuando yo fui a ver la película, y esto es totalmente verídico, acabando la película, dos señoritas que estaban sentadas dijeron: ‘esto es una porquería, tienes que ir a verla al teatro’”, rememora Rafael Perrín.
Durante 11 meses de ese año, los teatros en los que La Dama de Negro se presentó tuvieron llenos totales, incluso se ofrecieron descuentos en los pases para quienes llevaran sus boletos, tras haber visto la historia en el cine.
Todos los géneros
Desde hace 18 años, Benjamín Rivero comenzó a interpretar a John Morris, el director de escena que ayuda a Arthur Kipps a contar la aterradora historia que vivió en su juventud.
“Desde que vi la obra me enamoré de ella, porque es la única que toca todos los géneros, toca la comedia, el suspenso, el drama y el terror. Entonces, para un actor, hacer todo eso en una hora con 40 minutos es maravilloso”.
En el tiempo que ha sido parte del elenco, el actor de cine, televisión y teatro ha visto la forma en que La Dama de Negro se ha adaptado a los nuevos gustos de la gente.
“La obra es más ágil, hay nuevos sustos que antes no había. Entonces, gente que la vio hace 15, 20 años o más, me dice que está mucho más terrorífica y más ágil, porque antes era un poquito larga, y ahorita, a lo que va. O sea, sin perder la esencia de la obra”.
—¿Cómo sientes al público poblano?
— Se asusta para adentro. Es que es muy chistoso, porque ahorita estamos recorriendo muchos lugares de la república, hay gente que grita a la menor provocación y aquí como que les da pena, entonces como que gritan para adentro, se reprimen mucho, pero están aterrados igual que si gritaran para afuera.
“Al final ya no aguantan y empiezan a gritar, y es un público muy padre, muy perceptivo, eso lo notamos los actores, cuando están muy metidos en la obra y se nota inmediatamente, a todo reaccionan, y eso me encanta”.
Nuevos proyectos
Rafael Perrín, director y actor de La Dama de Negro ya trabaja en dos nuevas obras para el siguiente año: A vuelta de rueda y La ballena.
“Estoy preparando una obra bellísima que se llama A vuelta de rueda, con el maestro Pichardo. Dos señores de la tercera edad con cáncer terminal, los dos están en sillas de ruedas, por eso se llama A vuelta de rueda”.
“(…) Es un libreto bellísimo, de amor a la vida, de esperanza de vida, a pesar de que estás despidiéndote. Tiene un toque de terror en cuanto a lo que se trata, la enfermedad, pero también tiene mucha esperanza. Entonces es como un juguete que estreno en febrero”.
“La ballena es la historia de un profesor inglés con obesidad mórbida, que desde la reclusión en su hogar intenta recomponer su relación con su hija adolescente”.
“Vamos a hacer el estreno de una obra, la nueva de Brendan Fraser, el actor que ganó el Oscar, que se llama La ballena, compré los derechos y pues me van a ver un poquito gordito en unos meses”.
Y para 2025, Rafael Perrín adelante la posibilidad de traer El exorcista, una producción que montó en Colombia con gran éxito.
