Pedro Ferriz Hijar se destapó como aspirante para la presidencia en 2024 y lo haría por la vía independiente y propone cárcel para el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“¡Me destapo oficialmente como candidato a la presidencia! (…) Por mi amor al pueblo (…) México tendrá un jefe del ejecutivo que merece”, escribió.
El comunicador afirmó que las insignias de su mandato serán la honestidad, integridad, apoyo empresarial y cero corrupción.
Posteriormente, publicó un video con su plan para 2024, en el que mencionó que lo más importante es rescatar a nuestro país de lo que llamó un “tremendo error”, con la administración actual.
El conductor es hijo de Pedro Ferriz de Con, quien formalizó su candidatura independiente para la presidencia de México en septiembre de 2017 y nieto de Pedro Ferriz Santa Cruz, reconocido periodista mexicano.
Pedro Ferriz de Con intentó participar en 2018 como candidato independiente a la Presidencia de la República; sin embargo, no logró obtener el porcentaje de apoyos ciudadanos requerido para su registro. En esa elección Margarita Zavala, Armando Ríos Piter y Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”, sí lograron el apoyo necesario para iniciar su registro ante el INE.
Ferriz de Con logró popularidad en las redes sociales por un vídeo en el que se le ve insultando a un estudiante que le cuestionó "su fidelidad" a la patria. Lo que le ganó fama de extravagante y hasta loco, solo comparable con Don Nicolás Zúñiga y Miranda.
El zacatecano se convirtió en un personaje simpático que compitió por la vía independiente en los procesos electorales con Porfirio Díaz Mori en las elecciones de 1892, 1896, 1900, 1904 y 1910. Aunque siempre perdía, por su baja votación, aseguraba ser el triunfador y se proclamaba nuevamente presidente legítimo.
Tras su primera derrota, Zúñiga y Miranda denunció un fraude electoral y se proclamó a sí mismo como ganador. Como respuesta, el gobierno del general Díaz lo arrestó y lo mantuvo retenido 25 días. Al recuperar su libertad, Zúñiga se declaró “presidente legítimo” y se refería a Díaz como usurpador.
El gobierno de Díaz consideraba que Zúñiga era un lunático e inofensivo, y que no representaba ningún riesgo para el régimen, por ello no ejerció ninguna reprimenda más contra él. Mientras tanto, Zúñiga llegó a creer que realmente era el presidente legítimo y logró tener algunos seguidores entre los habitantes de la Ciudad de México.
Para muchos mexicanos de entonces, Zúñiga era solo una forma de tomar con humor y un símbolo hilarante de la carencia de la democracia en el país.
Luego de la Revolución, Zúñiga aún continuó participando en elecciones: en 1917 contra Venustiano Carranza y en 1920 contra Álvaro Obregón. Aunque nunca consiguió más que algunos miles de votos, él seguía siendo una figura popular y recordaba del hecho de que México todavía no se había convertido en una democracia completa.
Zúñiga participó en su última elección en 1924, pero en el curso de la campaña, recibió amenazas de muerte por parte de los partidarios del candidato “oficial” Plutarco Elías Calles. Nicolás Zúñiga y Miranda murió en la pobreza un año más tarde.
Este personaje se encuentra representado en el mural de Diego Rivera, Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central al lado del sargento Manuel de la Rosa. Este curioso personaje político también fue representado como personaje en la película México de mis recuerdos, de 1943 (dirigida por Juan Bustillo Oro y protagonizada por Joaquín Pardavé y Fernando Soler).