La mañana del 1 de julio de 2025, el Aeropuerto Internacional de Puebla, ubicado en Huejotzingo, registró un incidente que paralizó su actividad por varias horas. Un pasajero, identificado como Juan, falleció a bordo de un avión de Volaris que llegaba de Tijuana, Baja California.
La emergencia ocurrió en la pista de aterrizaje, minutos después de que la aeronave tocara suelo poblano. El personal de vuelo reportó la muerte súbita del hombre en su asiento, lo que movilizó de inmediato a los equipos de emergencia del aeropuerto.
A pesar de la atención médica que se le brindó, Juan ya no presentaba signos vitales al momento de ser atendido. Según los informes iniciales, padecía hipertensión y diabetes, condiciones que habrían provocado un paro cardiaco fulminante.
Este hecho derivó en el cierre temporal de la pista, afectando al menos un vuelo con destino a Cancún, el cual sufrió un retraso prolongado. Otros vuelos fueron reprogramados mientras se realizaban las investigaciones correspondientes y se retiraba el cuerpo del pasajero.
Cerca del mediodía, las operaciones fueron retomadas tras mover el avión a otra zona del aeropuerto. La situación generó retrasos en la logística aérea y alteró el itinerario de decenas de usuarios.
La administración aeroportuaria y la aerolínea no han dado a conocer posturas oficiales, pero el caso ha generado inquietud entre los viajeros, recordando la fragilidad humana incluso a miles de metros de altura.
